sábado, 16 de junio de 2012


¡Aprende a tomar la tensión arterial!


En diferentes ocasiones hemos escuchado la importancia que tiene mantener controlada la tensión arterial, puesto que ésta repercute directamente sobre la salud cardíaca; y que por esto es necesario tomarla mínimo una vez al mes.

Sin embargo, no le prestamos mucha atención, pasando por alto su impacto real en nuestra salud. Ante todo debemos entender que la tensión arterial es la fuerza con la que el corazón bombea la sangre hacia cada una de las células del organismo. Se mide mediante dos valores: la presión sistólica y la presión diastólica, donde lo normal se encuentra entre 120/80 mm Hg y 100/60 mm Hg.

La presión sistólica es la fuerza que se da cuando el corazón se contrae para impulsar la sangre a través de las arterias y no debe ser superior a 120 mm de Hg.  A su vez, la presión diastólica es la fuerza que se genera cuando el corazón se relaja para hacer recibir la sangre que viene por medio de las venas y no debe ser mayor a 80 mm de Hg.  

Para medir estas dos presiones, existe un aparato llamado Tensiómetro digital o manual, el cual nos permite mantener monitoreada la tensión arterial en la comodidad de la casa. El manual tiene un sistema de medición de presión que nos indica a través del manómetro, la presión sistólica y diastólica, lo cual debe ser complementado por un fonendoscopio para detectar el sonido y así saber cuándo es una presión y cuando es otra.  

Al momento de tomarla, la persona debe estar sentada, relajada; su brazo debe estar descubierto, semi flexionado, apoyándolo en el brazo de la silla o en una mesa. Si venía caminando o subió escaleras, debe descansar mínimo diez minutos para que el resultado sea más certero. Se recomienda tomarla en los dos brazos para diferenciar los valores de ambos. 

Pasos a seguir:

1. Coloca la banda alrededor del brazo, dos centímetros por encima del pliegue del codo. No puede estar muy apretada porque ésta se llenará de aire.

2. Palpa en la cara interna del brazo, el latido del pulso humeral con tus dedos índice y corazón; coloca encima de éste, la campana del fonendoscopio, el cual ya debes tener puesto para poder así escuchar los sonidos. 

3. Bombea la pera rápidamente hasta que alcance aproximadamente180 mm Hg.
4. Desinfla lentamente la banda, por medio de la perilla que está al lado superior de la pera, sin perder de vista el manómetro.

5. Cuando empieces a escuchar los latidos del corazón, mira el valor que marca el manómetro y éste será el de la presión sistólica.

6. Sigue escuchando los latidos, los cuales irán desapareciendo progresivamente, mientras continúas desinflando la banda.

7. En el momento que dejes de escuchar los latidos, el valor que marca el manómetro es el de la presión diastólica.

8. Repite el procedimiento en el otro brazo para corroborar los resultados. 

Recuerda que la Hipertensión Arterial es llamada el enemigo silencioso porque no presenta unos síntomas específicos, y las personas ni se dan cuentan que la tienen elevada, sino hasta que la alteración está avanzada. Por esta razón, será de gran ayuda que tengas en casa un Tensiómetro y sepas cómo tomarla.

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